Mantén tu melena impecable y sin preocupaciones.
Uno de los mayores retos tras una coloración es mantener las raíces bajo control. El crecimiento natural del cabello puede hacer que el color pierda uniformidad y que la melena luzca menos cuidada. La buena noticia es que con algunos trucos prácticos, productos recomendados y la frecuencia adecuada de retoques, es posible disfrutar de un cabello radiante entre visita y visita al estilista.
¿Por qué es importante cuidar las raíces?
Las raíces visibles no solo afectan la estética, también pueden dar la impresión de falta de cuidado personal. Mantenerlas bajo control ayuda a prolongar la armonía del color y a sentirte más segura en tu día a día. Además, un buen mantenimiento evita la sobrecarga de químicos en cada visita, cuidando así la salud de tu cabello.
Consejos prácticos para mantener el color en raíz
- Utiliza champús para cabellos teñidos. Ayudan a preservar la intensidad del color y a retrasar la oxidación.
- Aplica sprays o polvos retocadores. Son una solución exprés para disimular la raíz de forma temporal, perfectos entre lavados o antes de un evento.
- Evita el exceso de calor. El uso frecuente de planchas o secadores puede acelerar la pérdida de pigmento. Siempre protege con un buen spray térmico.
- Juega con peinados estratégicos. Trenzas, ondas suaves o coletas altas pueden camuflar el contraste de la raíz.
Productos recomendados para disimular raíces
- Sprays de color temporales. Rápidos de aplicar, desaparecen con el lavado.
- Polvos retocadores. Ideales para cubrir áreas específicas con acabado natural.
- Mascaras de color. Hidratantes con pigmento que refrescan el tono entre visitas.
¿Cada cuánto retocar la raíz?
La frecuencia depende de cada tipo de cabello y del contraste entre el color natural y el teñido. De forma general:
- Cada 3-4 semanas: para cabellos con canas o colores muy distintos al tono natural.
- Cada 5-6 semanas: en tonos más cercanos al color base o con técnicas como el balayage, que disimulan mejor el crecimiento.
- Cada 2 meses o más: si se utilizan técnicas de mechas difuminadas o colores de bajo mantenimiento.
Un buen plan de retoque adaptado a tu melena y estilo de vida es clave para lucir siempre impecable.
Mantener las raíces bajo control no tiene por qué ser un dolor de cabeza. Con el uso de productos adecuados, pequeños trucos de peinado y una planificación correcta de los retoques, es posible disfrutar de un color perfecto y sin estrés hasta tu próxima cita.
No olvides seguir a Merche Estilista en Instagram para no perderte nada.
